TRAYECTORIA DE MI HISTORIA
Aprender historia es muy esencial para todo ser humano y la sociedad en general, ya que podremos saber lo que sucedió en nuestro pasado, y así poder entenderlo, para de esta manera, comprender el presente que vivimos. Por lo tanto, visualizar los errores y aciertos del pasado, nos permitirá caminar en nuestro presente con más sabiduría, y de esta manera, ofrecer a nuestros hijos un futuro más acertado.
Los métodos que más suelo utilizar en la enseñanza de la historia en mi grupo son: la narración, la lectura comentada, la elaboración de cuestionarios como retroalimentación de los contenidos estudiados (más no para memorizar), observación de imágenes y videos que hacen referencia a la etapa de estudio para luego plantearles una serie de preguntas en base a las observaciones, elaboración por parte de los alumnos de guiones de entrevistas a diferentes personas. Por la tanto, de acuerdo a la etapa histórica a analizar, son las estrategias y métodos que utilizo para la enseñanza-aprendizaje de la historia.
La manera en que enseño historia, si se parece a la que algunos de mis maestros utilizaron durante mi educación básica y media superior. Por ejemplo, un profesor utilizaba todo el tiempo los cuestionarios, los cuales debía memorizar, desde luego, no existía la reflexión, el análisis y la crítica. En la preparatoria, la materia “Historia de México II”, el profesor que impartía esta clase, hizo que me gustara la Historia todavía más, ya que sus clases consistían en la narración; al entrar al salón anotaba en el pintarrón una serie de conceptos, personajes y fechas, para enseguida iniciar con dicha narración. A parte de evaluarnos con una prueba objetiva, nos comisionaba de manera individual o en equipo para que localizáramos objetos de determinadas etapas, y también realizáramos investigación documental en diversas fuentes. Considero que con las clases de este maestro, la historia tomó mayor significado en mi vida, aunque también debo reconocer, que faltó darle un tinte de más análisis y crítica a cada etapa de la historia y buscar la versión de otros autores, ya que en ocasiones caía en el error de que lo que escuchaba o leía era verdad única.
Los resultados obtenidos con los métodos en que enseño historia, han sido buenos al momento de evaluar con pruebas objetivas, y también con la prueba de enlace 2010, aunque no estoy muy satisfecho, ya que lo que hace falta, por ejemplo, es que el alumno sea más crítico de cada etapa de la historia que se estudia, que proponga en forma oral o escrita sus puntos de vista, y que hubiera hecho él para mejorar en los diversos aspectos como en lo político, social, económico, cultural, etc. También, que la mayoría de los alumnos tengan la inquietud de no conformarse de lo que leen o escuchan porque el maestro así se los pida, sino que por su propia cuenta, investiguen en diversas fuentes y luego lo comente en grupo para debatir lo que escribe cada autor sobre el periodo estudiado.
Lo mencionado en el párrafo anterior, tiene que ver mucho de que uno como docente busque diversas estrategias para encontrar en los alumnos el gusto por la historia, un gran reto pero al fin de cuentas una enorme satisfacción si se lograra. Hoy en la actualidad, los docentes debemos apropiarnos de las tecnologías como el internet, para utilizarlo como un recurso, ya que en las nuevas generaciones es el boom, y que se le puede sacar provecho para utilizarlo como un método para el aprendizaje de la historia.
Por último los materiales con que cuenta mi escuela para la enseñanza aprendizaje de la historia y que son de gran utilidad son: Enciclomedia para los grados de quinto y sexto, libros de la Biblioteca de Aula como de Escuela y algunos videos sobre determinadas etapas de la historia.
